La ONU dijo No: Ni enmiendas anticubanas ni bloqueo a Cuba
ueves, 01 de noviembre de 2018
7:59:49 p.m.
La Asamblea General de la ONU propinó una derrota diplomática a Washington al no aprobar sus ocho enmiendas anticubanas a la resolución «Necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos de América contra Cuba».
Una contundente victoria logró hoy la Mayor de las Antillas en la Asamblea General de las Naciones Unidas, que por 189 votos a favor, dos en contra y ninguna abstención aprobó la resolución «Necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos de América contra Cuba».
Por amplia mayoría las ocho enmiendas propuestas por el gobierno norteamericano al proyecto de resolución cubano fueron rechazadas.
«No hay peor ciego que el que no quiere ver», reza un refrán muy popular entre los cubanos, el cual se aplica a pie juntillas al presidente estadounidense Donald Trump, quien desde que tomó posesión del cargo el 20 de enero de 2017 ha hecho lo posible y lo imposible por desconocer la realidad de una Cuba independiente y soberana, y destruir a su Revolución.
No le bastó a Trump firmar el 16 de junio del pasado año el memorando que suprimió de forma unilateral la mayoría de los avances durante el mandato de su antecesor Barack Obama y derogar la directiva presidencial emitida por el gobierno anterior para la normalización de las relaciones bilaterales e instaurar una nueva con objetivos subversivos y desestabilizadores, que satisfacen los más bajos instintos de la reducida extrema derecha cubanoamericana de Miami.
No les bastó a las autoridades norteamericanas inventar la insostenible patraña de los ataques acústicos contra diplomáticos estadounidenses en La Habana para retrotraer aún más los nexos bilaterales, tratar de dañar la imagen del país y el auge de su industria turística.
La comunidad internacional ha visto decepcionada cómo el régimen de Donald Trump ha reforzado las principales direcciones de esta guerra económica contra Cuba, manifestadas en mayores sanciones económicas y persecución a la actividad empresarial y a las transacciones financieras internacionales de la Isla, dañando las relaciones con terceras naciones y la cooperación mundial.
Sin embargo, la Asamblea General de las Naciones Unidas le propinó este primero de noviembre una dura derrota diplomática a Washington al no aprobar sus ocho enmiendas anticubanas a la resolución «Necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos de América contra Cuba, diseñadas a todas luces para romper el abrumador consenso mundial, y exigirle además la eliminación de la unilateral medida coercitiva, una reliquia de la Guerra Fría.
Desde hace 27 años consecutivos, a partir de 1992, la Asamblea General de las Naciones Unidas ha aprobado con creciente mayoría la resolución cubana contra el bloqueo.
Los cubanos no somos un pueblo ingenuo y sabemos que a la administración Trump no le importa hacer el ridículo, quedar aislado y mucho menos acatar la exigencia de la Asamblea General. Pero aun así la votación de este jueves se erige en un fuerte castigo moral a tan inhumano proceder contra una pequeña nación que lucha a brazo partido por preservar su soberanía e independencia.
Cuba se mantiene firme en la denuncia internacional de este comportamiento incivilizado y cuenta para ello con la inmensa mayoría de la Humanidad. El muro del bloqueo finalmente caerá más temprano que tarde.
Bruno Rodríguez: «No hay ni habrá espacio para la intromisión de una potencia extranjera»
El canciller cubano, Bruno Rodríguez, comienza su discurso expresando condolencias en nombre del gobierno cubano al pueblo y a las autoridades de la ciudad de Pittsburg en Estados Unidos, por los hechos ocurridos en la Sinagoga donde fallecieron 11 personas. Además, pide reciban también condolencias el pueblo y autoridades de Indonesia por el desastre aéreo que provocó la pérdida de 189 personas.
El Ministro de Relaciones Exteriores cubano hace referencia a las historias de varios niños y niñas que sufren de diferentes enfermedades graves y no tienen acceso a las medicinas o los aparatos médicos óptimos para sus tratamientos debido a que el bloqueo no permite a Cuba comprarlos a proveedores estadounidenses.
Seguidamente expone los hechos que demuestran el impacto negativo que ha tenido el bloqueo durante todos estos años a Cuba y su pueblo.
Luego hace referencia a las enmiendas presentadas por Estados Unidos que pretenden enturbiar el proceso de votación del día de hoy: «Las enmiendas son una artimaña deshonesta», asevera el diplomático.
Igualmente invita al gobierno de Estados Unidos a debatir sobre derechos humanos o desarrollo sostenible y expresa la voluntad por la parte cubana de hacerlo en cualquier momento.
Acusa además al gobierno norteamericano de la realización de crímenes contra la humanidad, y del desarrollo de armas de exterminio masivo.
«Ustedes son los que perfeccionan las armas nucleares, militarizan el ciberespacio y el espacio ultraterrestre», afirma.
También recuerda que con las guerras que el gobierno de EE.UU. ha lanzado en estos años ha causado millones de muertes. Sostiene que el norteamericano es un gobierno que ha utilizado las ejecuciones extrajudiciales, el secuestro y la tortura.
Reitera una vez más que EE.UU. mantiene la base de Guantánamo que usurpa ilegalmente territorio cubanoy donde mantiene una cárcel fuera de toda legalidad internacional.
«En medio de la opulencia de ese país 40 millones de estadounidenses viven en condiciones de pobreza (…) Más de medio millón de sus ciudadanos duermen en la calle (…) La educación de calidad no está al acceso de las mayorías que su gobierno ni representa ni defiende. El gobierno que usted integra es un gobierno de millonarios que impone políticas salvajes», asevera Rodríguez Parrilla.
El Canciller cubano denuncia además la desigualdad salarial entre mujeres y hombre, así como la discriminación racial y la generalización de las denuncias por acoso sexual en Estados Unidos.
«Hay un patrón racial diferenciado en la población penitenciaria norteamericana, en la ejecución de la pena capital aplicada a menores y discapacitados mentales y la muerte de menores baleados por la policía», afirma.
Reitera además que el gobierno de EE.UU. interviene sin escrúpulos en los procesos internos de la mayoría de los Estados latinoamericanos, trata de derrocar por la fuerza y difama al gobierno legítimo de Venezuela mientras llama a la violencia y al golpe de estado.
Revela que las intenciones del gobierno de EE.UU. son ejercer la dominación imperial en América, acto que evoca a la doctrina Monroe y la diplomacia de las cañoneras.
EE.UU. es parte de solo el 30 por ciento de los instrumentos principales de derechos humanos y no reconoce el derecho a la vida, de los niños y niñas, de la alimentación, etc.
Para finalizar el diplomático cubano expresa qué constituye realmente el bloqueo para Cuba:
- El bloqueo continúa siendo el obstáculo principal del plan de desarrollo 2030.
- Constituye una violación de los propósitos y principios de la Carta de las Naciones Unidas y del Derecho Internacional.
- Vulnera también las reglas internacionales del comercio y la libertad de navegación.
- Se opone al consenso de la comunidad de estados latinoamericanos, caribeños y del mundo, y convoca al justo rechazo de la comunidad internacional.
- Continúa siendo signo definitorio de la relación bilateral entre Estados Unidos y Cuba, a pesar de nuestras intenciones de diálogo basado en el respeto mutuo.
«Las cubanas y cubanos de todas las generaciones guardaremos invariable lealtad al ejemplo de José Martí para proclamar, con igual convicción, antes que cejar en el empeño de ver libre a la Patria, primero se unirá el mar del sur al mar del norte y nacerá una serpiente de un huevo de águila», culminó Rodríguez Parrilla.
(Fuente: Granma/PL/cubadebate/VanguardiadeCuba/ Miriam Elisa Peña López)
El informe que Cuba realiza cada año sobre las afectaciones del bloqueo económico, comercial y financiero de Estados Unidos contra la Isla, está disponible en: En formato PDF- español (846 KB), En formato PDF- inglés (946 KB)
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