Del tsunami, los profetas y el fin del mundo
31/03/2011 1:04:57
¿Predijeron los mayas el sismo de Japón? ¿Se trata de una conspiración internacional? Crisis económica mundial, terremotos que provocan tsunamis capaces de borrar a ciudades enteras de la faz de la tierra, crisis nuclear, revueltas en el mundo árabe, guerra en Libia. Las predicciones de Nostradamus. Las teorías de la «conspiración» mediante el HAARP. La vidente Luz de María de Bonilla.
A los más predispuestos no les faltan razones para atar cabos y pensar que ha comenzado el apocalipsis. La prueba está en internet. A raíz del tsunami de Japón las búsquedas sobre el «fin del mundo» han repuntado de forma espectacular en los buscadores y los foros especializados bullen de especulaciones en torno a todo tipo de profecías, como la de Nostradamus.
El astrónomo francés predijo que el fin del mundo llegaría tras un «gran conflicto». Son muchos los que han imaginado que la actual revolución musulmana va a derivar en esa «guerra final» de la que hablaba Nostradamus. Pero lo cierto es que las traducciones de las revelaciones que circulan por internet no están claras y dan pie a múltiples interpretaciones.
También se habla de las predicciones mayas, pero son pocos los que conocen su verdadero contenido. El famoso calendario augura el final de nuestra existencia el 21 de diciembre (algunos textos hablan del 22) de 2012, momento en que empezará la cuenta atrás para que dé comienzo la primera de las siete profecías que los mayas dejaron como legado: La Tierrra tal y como la conocemos hoy se destruirá.
Las restantes profecías son:
Segunda: Viviremos en un mundo de crisis absoluta, lleno de penurias.
Tercera y cuarta: Cambios climáticos asolarán el planeta.
Quinta profecía: Aprenderemos de nuestros errores.
Sexta: «Apocalipsis» Un cometa anunciará una nueva forma de vida.
Séptima: El Hombre y el mundo aprenderán ser sólo uno. Aprenderemos a valorar la Naturaleza.
Los seguidores de estas teorías defienden que el desplazamiento del eje de la Tierra y del propio Japón se relaciona con el cumplimiento de la primera profecía: «la Tierra se verá afectada por los cambios en el sol mediante un desplazamiento de su eje de rotación». Según estos textos, a partir de ese movimiento se producirán «grandes cataclismos», como el tsunami que ha provocado miles de muertos y desaparecidos en el país nipón.
A pesar de las evidentes coincidencias de las predicciones con los últimos acontecimientos vividos por la Humanidad, lo cierto es que los mayas hablaban de la posibilidad de cambio.
Por otro lado, Benjamin Fulford, periodista canadiense nacionalizado japonés, ya habló en 2008 sobre la posible catástrofe que amenazaba al país nipón. Para Fulford, la isla iba a ser atacada por un terremoto mediante el uso de las tecnologías relacionadas con el HAARP (programa estadounidense que estudia las propiedades de la ionosfera) si el gobierno no se sometía a los dictámenes de lo que él denomina oligarquía mundial.
Lo cierto es este vídeo grabado hace dos años no ha parado de recibir visitas en YouTube desde que tuvo lugar el tsunami el pasado viernes 11 de marzo, y muchos internautas relacionan las llamativas teorías de Fulford con un complot para acabar con el mundo.
Las teorías de la «conspiración» mediante el HAARP han sido descritas también por el periodista Sharon Weinberger, quien tachó al programa de investigación de «Moby-Dick de las conspiraciones». También el informático David Naiditch ha culpado al HAARP de catástrofes naturales que han devastados países como Afganistán o Filipinas con claros «fines terroristas».
En agosto de 2010, varios físicos rusos culparon a EE.UU. de estar tras la intensa ola de calor que asoló el país y que originó numerosos incendios, duplicando la mortalidad del país.
En origen, el objetivo del programa HAARP es potenciar avances tecnológicos que permitan favorecer las radiocomunicaciones y los sistemas de vigilancia, tales como la detección de misiles. Y ya son muchos los que en la Red empiezan a expresar su miedo y a adherirse a teorías maquiavélicas del «Bien y del Mal», a conjeturas sobre el «Fin del Mundo» o a creencias de cáracter religioso que les salvarán del «desastre».
También la vidente Luz de María de Bonilla, muy seguida en Latinoamérica por afirmar que habla con la Virgen, ha despertado la curiosidad de los internautas por las continuas referencias a Japón que hacía en su blog días antes de que se produjera el tsunami. «Oren por Japón», decía el 20 de febrero; «Oren, el agua causa gran destrucción», alertaba el 14; «Oren por Japón, sufrirá», predecía el pasado 8 de febrero; «Los sismos no se hacen esperar», decía el 3 de febrero e incluso advertía que «el horror viene como un gigante con paso firme» que «estremecerá la Tierra y hará mover las aguas», el pasado 22 de mayo.
Aunque, como siempre ocurre en estos casos, los más escépticos atribuyen estas coincidencias a la gran cantidad de países que menciona en sus oraciones y a la vaguedad de sus expresiones.
En nuestras manos dejaron el futuro de nuestro maltratado planeta Tierra.
De nuestras decisiones también depende la evolución de la Historia.
0 comentarios